El capitalismo está destruyendo el equilibrio climático estructurado por la naturaleza. Se ha abandonado el instinto de supervivencia y su marco legal. Lo vivimos en carne propia en nuestra ciudad con los incendios isleños. Se reclama "libertad" pero ejercida por los que tienen el marco del poder económico y quienes se suman a su expresión por anhelo de pertenecer a clases dominantes.
Nuestra Capital es cruel, ataca violentamente a las enfermeras que reclaman por sus derechos no a quienes sostienen el enfrentamiento ideológico violento contra el gobierno. El proyecto económico que se está desarrollando con sectores nacionales está generando discordia que intenta ocupar por esencia la difusión periodística. El Aporte Solidario y Extraordinario afecta a menos de diez mil personas para lograr recuperación de la economía.
Pero actualmente el tema más impactante es la decisión de la Corte Suprema que ha enfrentado al gobierno nacional por el trámite que abre el "per saltum" de los jueces Bruglia, Bertuzzi y Castelli, quienes buscan la consolidación de sus designaciones que fueron realizadas por Macri sin acuerdo del Senado. Mientras se espere la resolución durarán las licencias concedidas a esos jueces. La intención realmente importante de la Corte es declarar válidos los traslados. En el fondo esperamos los argentinos ver si tenemos una Corte que respeta la Constitución y a los otros poderes estatales o si obedece a presiones de sectores con fuerza económica.
Realmente el momento político que vivimos muestra un ataque opositor enfurecido, se apunta a desgastar el gobierno intentando asimismo ocultar las tremendas acciones ilegales de la gestión de Macri. La posición que tomaron con los familiares de los muertos del ARA San Juan muestra a que estaban dispuestos para destinar la riqueza a otro sector.
La emergencia pandémica motiva medidas asistenciales como el IFE y congelamientos tarifarios que buscan acceder a actividades que debiliten la tragedia que padecemos. Los objetivos son humanistas.